- La tendinitis del extensor corto del pulgar puede limitar tus actividades diarias.
- Una intervención a tiempo reduce la inflamación de manera significativa y eficaz.
- Realizar ejercicios específicos alivia el dolor y mejora tu movilidad del pulgar.
- La fisioterapia personalizada acelera tu proceso de recuperación.
- Con el tratamiento adecuado, puedes evitar complicaciones a largo plazo y cirugía.
- Aprende técnicas de prevención para mantenerte activo y evitar recaídas.

¿Qué es la tendinitis del extensor corto del pulgar?
La tendinitis del extensor corto del pulgar es una inflamación del tendón que ayuda a mover el pulgar.
Este tendón es esencial para muchos movimientos diarios, como agarrar objetos, escribir y otras actividades que requieran precisión con la mano.
Cuando este tendón se inflama, causa dolor y limita la movilidad, afectando así tu calidad de vida.

Causas de la tendinitis del extensor corto del pulgar
Esta condición puede desarrollarse por diferentes razones.
A continuación, te menciono algunas de las más comunes:
- Movimientos repetitivos: Actividades que requieren mover el pulgar repetidamente pueden causar estrés en el tendón.
- Esfuerzo excesivo: Levantar objetos pesados o hacer un esfuerzo intenso con el pulgar también puede provocar inflamación.
- Lesiones: Un golpe directo o una caída pueden dañar el tendón, llevando a la aparición de la tendinitis.
- Mala postura de la mano: Utilizar herramientas o dispositivos de manera incorrecta puede contribuir a la inflamación del tendón.
Síntomas de la tendinitis del extensor corto del pulgar
Identificar los síntomas a tiempo te ayudará a buscar tratamiento antes de que la situación se complique.
Aquí te dejo los síntomas más comunes:
- Dolor: El dolor suele concentrarse en la base del pulgar y puede intensificarse durante las actividades que requieran su uso.
- Hinchazón: La inflamación puede hacer que el área alrededor del tendón se vea hinchada y sensible al tacto.
- Dificultad para mover el pulgar: La movilidad del pulgar se ve limitada, dificultando actividades cotidianas.
- Debilidad: Tu pulgar puede sentirse débil al tratar de agarrar o sostener objetos.
Diagnóstico de la tendinitis del extensor corto del pulgar
Para un diagnóstico preciso, deberás acudir a un profesional de la salud.
El diagnóstico generalmente incluye:
- Examen físico: Tu médico evaluará el rango de movimiento del pulgar y examinará el área afectada.
- Historial médico: Tendrás que proporcionar detalles sobre tus síntomas, actividades recientes y cualquier lesión previa.
- Pruebas de imagen: En algunos casos, puede ser necesario realizar una radiografía o una resonancia magnética para descartar otras condiciones.
Tratamiento de la tendinitis del extensor corto del pulgar
El tratamiento puede variar según la gravedad de la tendinitis.
Aquí te comparto algunas de las opciones más comunes:
- Reposo: Dar descanso a la zona afectada es fundamental.
Evita actividades que causen dolor o estrés en el pulgar.
- Hielo: Aplicar hielo sobre la zona afectada puede reducir la inflamación y aliviar el dolor.
- Medicamentos: Los antiinflamatorios no esteroides (AINEs) pueden ayudarte a reducir la inflamación y el dolor.
- Fisioterapia: Realizar ejercicios específicos bajo la guía de un fisioterapeuta puede fortalecer el tendón y mejorar la movilidad.
- Inmovilización: En casos más graves, una férula o un yeso pueden ser necesarios para inmovilizar el pulgar y permitir su recuperación.
- Cirugía: Si los tratamientos conservadores no funcionan, la cirugía puede ser una opción.
Sin embargo, esto es raro y solo se considera en casos extremos.
Prevención de la tendinitis del extensor corto del pulgar
Evitar esta condición es posible si tomas algunas precauciones.
Aquí tienes algunos consejos para prevenirla:
- Evita movimientos repetitivos: Si tu trabajo o actividades requieren usar el pulgar repetidamente, toma descansos frecuentes para evitar el estrés en el tendón.
- Fortalece tu pulgar: Realizar ejercicios de fortalecimiento puede ayudar a prevenir la inflamación del tendón.
- Usa herramientas adecuadas: Asegúrate de utilizar herramientas y dispositivos de manera correcta para evitar malas posturas y sobreesfuerzos.
- Calienta antes de actividades: Si practicas deportes o realizas actividades que requieren usar el pulgar, un buen calentamiento puede preparar tus músculos y tendones.
Ejercicios recomendados para la tendinitis del extensor corto del pulgar
La fisioterapia es esencial en el tratamiento y prevención de la tendinitis.
Aquí te dejo algunos ejercicios que pueden ayudarte:
- Flexión y extensión del pulgar: Con la mano relajada, mueve el pulgar hacia adelante y luego hacia atrás, repitiendo varias veces.
- Aprietos suaves: Usa una pelota de goma blanda o una esponja para apretar suavemente, fortaleciendo así los músculos del pulgar.
- Estiramientos: Sujeta tu pulgar con la otra mano y estíralo suavemente hacia atrás, manteniendo la posición unos segundos antes de soltar.
- Rotación del pulgar: Mueve el pulgar en círculos pequeños, primero en una dirección y luego en la otra.
¿Cuándo debes consultar a un profesional?
Si sientes dolor persistente, hinchazón o debilidad en el pulgar, no lo ignores.
Consultar a un profesional te ayudará a recibir el diagnóstico y tratamiento adecuados.
No dejes que la tendinitis avance sin atención médica, ya que puede empeorar y limitar tus actividades diarias.
Consejos finales
La tendinitis del extensor corto del pulgar puede ser muy molesta, pero con el tratamiento adecuado y algunos cambios en tus hábitos, puedes superarla.
Escucha a tu cuerpo, evita el sobreesfuerzo y sigue los consejos de tu fisioterapeuta.
¡Tu pulgar lo agradecerá!