Tendinitis rotuliana

La tendinitis rotuliana es una inflamación del tendón que conecta la rótula con la tibia.
Este tipo de lesión en la rodilla es bastante frecuente entre quienes practican deportes de alto impacto.
El dolor en la rodilla suele aumentar al realizar actividades físicas como correr, saltar o subir escaleras.
Es crucial aplicar un tratamiento adecuado que puede incluir fisioterapia para aliviar los síntomas y prevenir complicaciones.
La prevención pasa por ejercicios de estiramiento y fortalecimiento muscular específico para mantener la rodilla en buen estado.
Consultar a un fisioterapeuta te ayudará a desarrollar un plan personalizado para tratar y prevenir la tendinitis patelar.

¿Qué es la tendinitis rotuliana?

La tendinitis rotuliana, también conocida como "rodilla del saltador", es una patología que afecta al tendón rotuliano o patelar.

Este tendón conecta la rótula con la tibia y es esencial para la extensión de la pierna.

Esta condición es común entre deportistas, especialmente aquellos que practican deportes que implican saltos frecuentes como el baloncesto o el voleibol.

¿Cómo se desarrolla la tendinitis rotuliana?

La tendinitis rotuliana se desarrolla principalmente por el sobreuso del tendón, lo cual resulta en pequeñas rupturas en el tendón debido al estrés repetitivo.

Esta condición puede ser agravada por una mala técnica, calzado inadecuado, terreno de juego duro o superficies irregulares, así como por una falta de calentamiento y estiramiento adecuados.

Síntomas de la tendinitis rotuliana

El síntoma principal de la tendinitis rotuliana es el dolor en la parte frontal de la rodilla, justo debajo de la rótula.

Este dolor puede variar de leve a severo y empeora con la actividad física.

Otros síntomas incluyen:

Dolor al saltar o correr
Dolor al flexionar la rodilla
Rigidez y sensibilidad en el tendón afectado
Inflamación en la zona del tendón
Debilidad en la rodilla afectada

Diagnóstico de la tendinitis rotuliana

El diagnóstico de la tendinitis rotuliana generalmente comienza con una evaluación clínica realizada por un profesional de la salud.

Esto incluye revisar los síntomas y antecedentes médicos del paciente, así como realizar un examen físico para determinar la localización y la intensidad del dolor.

En algunos casos, se pueden requerir pruebas adicionales como radiografías, ecografías o resonancia magnética para descartar otras patologías o evaluar el grado de daño en el tendón.

Tratamiento de la tendinitis rotuliana

Reposo y modificación de actividades

El primer paso en el tratamiento de la tendinitis rotuliana es reducir la actividad física que agrava el dolor.

En la mayoría de los casos, esto significa evitar actividades de alto impacto como correr y saltar.

Es fundamental darle tiempo al tendón para que se recupere y sane.

Terapia física

La fisioterapia es una parte esencial del tratamiento de la tendinitis rotuliana.

Un fisioterapeuta puede elaborar un programa de ejercicios específicos para fortalecer los músculos que rodean la rodilla y mejorar la flexibilidad.

Esto ayuda a reducir el estrés en el tendón y previene futuras lesiones.

Aplicación de hielo

Aplicar hielo en la zona afectada durante 15 a 20 minutos varias veces al día puede ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor.

Medicamentos antiinflamatorios

Los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINEs) como el ibuprofeno pueden ser utilizados para reducir el dolor y la inflamación.

Uso de ortesis y soportes

El uso de rodilleras o cintas patelares puede ayudar a descarguar el tendón y proporcionar alivio mientras se realiza actividad física.

Terapia con ondas de choque

Para casos crónicos, la terapia con ondas de choque puede ser efectiva.

Este tratamiento utiliza ondas acústicas para estimular la curación en las áreas dañadas del tendón.

Prevención de la tendinitis rotuliana

Calentamiento y estiramiento

Antes de realizar cualquier actividad física, es esencial un buen calentamiento para preparar los músculos y tendones.

También es importante realizar estiramientos que enfoquen en la flexibilidad de la rodilla y la musculatura circundante.

Técnica adecuada

Asegurarse de tener una técnica correcta al realizar deportes o ejercicios ayudará a reducir el riesgo de desarrollar tendinitis rotuliana.

Un entrenador o fisioterapeuta puede proporcionar orientación sobre la técnica adecuada.

Uso de calzado adecuado

El calzado que proporciona el soporte necesario y amortiguación puede ayudar a prevención lesiones al reducir el estrés en la rodilla.

Incremento gradual de la carga

Al comenzar una nueva actividad física o aumentar la intensidad del entrenamiento, es importante hacerlo gradualmente.

Incrementar de manera lenta y constante permite que los músculos y tendones se adapten sin sobrecargarse.

Cuándo consultar a un profesional de la salud

Si experimentas síntomas persistentes de la tendinitis rotuliana que no mejoran con el tratamiento conservador, es hora de consultar a un profesional de la salud.

El dolor severo, la inflamación persistente o cualquier otra molestia que afecte tu vida diaria son razones suficientes para buscar la opinión de un especialista.

Tendinitis ONE: Tu aliado en fisioterapia para la tendinitis rotuliana

En Tendinitis ONE, comprendemos el impacto que la tendinitis rotuliana puede tener en tu vida diaria y en tu desempeño deportivo.

Nuestro equipo de especialistas en fisioterapia está aquí para brindarte un tratamiento personalizado que te ayudará a recuperarte de manera efectiva y prevenir futuras lesiones.

No dejes que la tendinitis rotuliana te detenga.

¡Te ayudamos a volver a tus actividades favoritas con fuerza y seguridad!

Para más información y para concertar una cita, visita nuestro sitio web:

Tendinitis ONE
tendinitis.one